sábado, 29 de septiembre de 2007

OCIO, de Mirta Núñez

El trabajo el salud, pero el ocio también.
Trabajar para vivir, no vivir para trabajar.
Disfrutar del tiempo libre, a solas o acompañados.
Darse permiso para no hacer nada "productivo", también es salud.

Mirta Núñez
www.mirta-nunez.com.ar

TERAPIA

Alguna vez leí una frase que me gustó:

"Se puede vivir sin terapia. Después de."

Mirta Núñez
www.mirta-nunez.com.ar

AMOR DE CONDENADOS, de Carlos de la Rosa Vidal

AMOR DE CONDENADOS
Por: Carlos de la Rosa Vidal (1980) Peruano
Email: cj.delarosav@gmail.com
Del libro "Condenados a la felicidad"


Los amores son encuentros.
Observo encuentros por montones,
Observo algunos como para las novelas
Encuentros de un gigante contra un bebé.

Los amores son condenados.
Hay condenas que duran unos años,
Algunos solamente una noche de sábado.
Pero encuentros al fin.

Los amores son viajes.
Existen los que peregrinan sin ruta.
Amores con sólo un gesto revelados.
Amores de tan sólo un paso.
Y por eso condenados.

Los amores son historias de encuentros.
Y el encuentro mismo.
De quienes parten sin nada y lo pierden todo.
O de quienes parten con todo y vuelven multiplicados.
Por eso los amores son como los viajes.

Los amores son bailes.
Los hay de quienes sabiendo bailar, no bailan.
De quienes bailan porque saben.
De quienes bailan aun sin saber… ¡pero bailan!
Y también de quienes no saben nada y no se atreven.
Por eso mismo los amores cuentan tantas historias.

Los amores son canciones.
Aquellos como las que suenan en las radios.
Mayormente tristonas por el sufrir de los autores.
Por aventureros o por idiotas.

Los hay de quienes cuentan todo y no cantan nada.
Amores narrados en una sola palabra.
En donde cada letra esconde la velocidad de la marcha.
Ya ves, por eso los amores son como los bailes.

Los amores son obsequios.
Los hay de quienes esperan y nunca regalan.
Amores como los de quienes obsequian sin respuestas.
Amores como los de quienes reciben y nunca agradecen.
Felizmente hay también de quienes contestan.
Y quienes provocan el encuentro.

Los hay de quienes piensan que en el amor
encontrarán la felicidad.
Auténticamente hay de quienes
hallan el amor compartiendo su felicidad.

Felicidad que ya tienen antes de amar.
De quienes buscan a quien compartirles su felicidad.
Hay amores de quienes desean que les den felicidad.
Pobres locos que aman.
No saben que los amores verdaderos son los de los que dan.
No saben que el amor no es encontrar felicidad.
Amor es compartir la felicidad.
Una que ya tienen antes del viaje, quienes buscan amar.

Hay quienes están tristes y quieren que los hagan felices.
Pobres locos verdaderos
No saben que ellos mismos deben producir su felicidad
Una para compartirla cuando encuentren a quien amar.
Por eso los amores son viajes,
son encuentros, son historias,
Son canciones y son bailes.

Éste es el amor de los condenados.

sábado, 1 de septiembre de 2007

ESCRIBIR

“Escribir me ayudó a que los fantasmas no me atraparan”

(Mauricio Rosenfeld, escritor uruguayo)